Desde Corea con amor nos llega Elsword, cargado de acción, heroísmo y ojos enormes.
Tras varios juegos exclusivos del mercado coreano que más tarde acabaron llegándonos, Elsword también hace su aparición en el viejo continente, después de que nuestros compañeros asiáticos lo disfrutaran durante 4 largos años.
El juego sigue una trama bastante lineal en un igualmente lineal intento de entretener a jugadores casuales que no exigen demasiado a sus títulos, sobre todo en lo que respecta a narrativa y a jugabilidad.
Podremos elegir entre una lista de 6 personajes no personalizables para iniciar la búsqueda de fragmentos de cristal, un elemento capaz de otorgar vida y prosperidad.
La jugabilidad es una mezcla entre acción y plataformas donde iremos de mazmorra en mazmorra repartiendo mamporros a diestro y siniestro.
Gráficamente, el juego ofrece un sector visual muy bonito, pero carente de detalles, que podría brillar más por su estilo cartoon que por otra cosa.
Elsword es un juego entretenido, pero no destacable. Está orientado a aquellos que desean un poco de diversión rápida sin más complicaciones a base de hacer mucho daño en poco tiempo.
Como suele decirse, pasará sin pena ni gloria.
Le ha costado cuatro años, pero finalmente Elsword, un MMO gratuito de marcada acción, ha aterrizado en el viejo continente, listo para dejarse ver en los ordenadores de miles de personas.
A primera vista, es obvio que el título está más pensado para un público joven y poco exigente que para los jugadores más curtidos, y no sólo en la mecánica, sino también en la forma en la que el juego se nos presenta, con un ambiente relajado, poco serio y sin muchas pretensiones, todo ello cortesía de los chicos de Gameforge.
En una tierra una vez yerma, un poderoso cristal llamado El dio vida y prosperidad donde no había ni sombra de la misma.
No obstante, y en un giro argumental muy sorprendente, se rompió el equilibrio (no sabemos muy bien cuál), lo que provocó una gigantesca detonación que destruyó la gema, diseminando sus fragmentos a lo largo y ancho de la tierra de Helios.
La tarea a acometer será, obviamente, la búsqueda de dichos fragmentos para salvar el mundo.
Como de costumbre, en nuestra primera sesión tendremos que elegir a nuestro personaje.
A diferencia de muchos MMORPG's, donde el personaje es libremente personalizable, Elsword incluye 6 arquetipos entre los que elegir, sin poder actuar directamente sobre su aspecto físico.
Si se desea, se podría decir que cada uno representa a una clase, aunque, siendo sinceros, dicha interpretación se basa más en libertad poética que en hechos concretos.
Aunque la ausencia de características podría restar valor a la personalidad del avatar, lo cierto es que cada personaje tiene unas muy marcadas diferecias que funcionan de acuerdo al trasfondo del título, ofreciendo pues varios estilos jugables muy diferenciados.
Si nos centramos en el juego, es un título que más que nada ofrece una acción constante, basándose en muchas de las reglas que estamos acostumbrados a ver. La acción es bidireccional, quedándonos pues un regusto a plataformero/acción horizontal con poco más donde elegir.
El combate, que constituye un 80% del juego, funciona en tiempo real, y es tan accesible como pulsar un par de botones para combatir, lo cual es una mecánica accesible y que nos permitirá encadenar decenas de combos sin mucha dificultad.
En lo que respecta a la variedad, una vez más nos encontramos ante un título totalmente exento de ella, lo que significa que muchas misiones se limitarán a limpiar de enemigos la pantalla.
El PvP, aunque digno de mención, no es nada revolucionario. No obstante, se las apaña considerablemente bien para mantener a los jugadores entretenidos con un nivel de desafío creciente, inalcanzable por parte de la IA del juego.
Aunque no son muchos los que deciden dejarse sus valiosos billetes en este juego, la tienda ofrece unos beneficios más que desequilibrantes, dando a los usuarios de pago unas ventajas brutales y completamente fuera del alcance de los usuarios gratuitos sin importar cuánto se esfuercen los mismos.
Gráficamente, Elsword se presenta colorido y vivaracho, con personajes que parecen sacados de un anime japonés.
No obstante, tras un examen más detallado, uno se da cuenta de que el aspecto técnico no está particularmente cuidado: es pobre en detalles, no muy avanzado y un tanto repetitivo.
Aunque cierto es que el aspecto animado suple, en cierta forma, dichas carencias, la verdad es que se nota para quién está dirigido el juego.
Elsword es innegablemente un buen juego. No es genial, no es innovador, pero es bueno y divertido. Los combates empiezan por ser sencillos y agradables, pero acaban volviéndose repetitivos y aburridos con el paso del tiempo. Para más inri, la tienda desequilibra mucho la situación de los jugadores.
Por tanto, Elsword es sólo para los que deseen un poco de diversión rápida, sin echarle muchas horas ni complicarse mucho la vida.
¿Listo para entrar en el mundo de Elsword? ¡Haz clic para jugar ahora!Pros
Estilo gráfico agradable
Estilo de combate apropiado
Contras
Muy repetitivo
Técnicamente mediocre
El dinero real ejerce una gran influencia
Pros
Contras
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